Corea del Norte, un punto de vista imparcial.

Kim II Sun con Stalin

Al escuchar las palabras "Corea del Norte" a todos nos viene a la cabeza la imagen de ese chiquitín gritón que parece jugar con su enorme ejército cual niño con soldaditos de plástico. Recordamos las tantas veces que le hemos visto en su palacio presidencial, subido muy probablemente a un elevado taburete, mientras observa orgulloso cómo su armamento militar desfila delante de sí. Luego nos llega a la memoria esa "inexplicable" demostración de fuerza y poderío armamentístico del que hizo gala hace no mucho tiempo y que, como es costumbre en Europa, no se explicó en ningún momento la razón exacta de esa repentina exaltación. Según los medios de comunicación occidentales no era más que un tapón de medio metro con aires de grandeza que quería alardear de sus "juguetes", pero, tal y como ha ocurrido tantas veces, la verdadera razón que lo llevó a hacer eso es incluso comprensible si se ve desde la perspectiva adecuada.

Sobre Corea del Norte se ha informado y desinformado mucho a la vez. Nadie niega a estas alturas la existencia de los campos de concentración (perfectamente visibles con el google Earth) y de la idolatría absurda y febril que existe hacia sus gobernantes. Tampoco es coherente negar el brutal bloqueo de internet y su terror a que los ciudadanos coreanos divisen una forma de vida diferente a la que siempre han llevado desde que se fundó el país. El absoluto desconocimiento que posee esta gente sobre lo que se cuece en el mundo resulta chocante e incomprensible para muchos, pero al encontrarse rodeados de enemigos y contando con  su armamento nuclear como única arma disuasoria no es de extrañar que miren con tanta desconfianza al exterior. Al fin y al cabo, todo occidente lleva intentando desestabilizar y derrocar al país desde su fundación, y una prueba de ello son las recientes sanciones que se quisieron imponer a Norcorea en 2013 y que han sido, de hecho, la razón del enconado conflicto. Esas sanciones, como siempre, no buscan hacer justicia, sino que responden a intereses puramente económicos.

A pesar de todo, esa imagen de Corea de los años cincuenta en la que todo se hace a mano, con una capacidad industrial tan pobre que ni siquiera pueden hacer vidrio perfectamente plano y transparente y, lo que más llamó la atención, la casi absoluta carencia de tráfico que existe en las calles no es del todo cierta. Los documentales que dicen esto poseen una visión completamente parcial del asunto y omiten oportunamente muchos detalles. No dicen nada sobre el bloqueo occidental que sufre y que no se pueden permitir tener tantos vehículos porque la UE y los EE.UU cortan cualquier suministro de petróleo para que no llegue al país, que si hay desnutrición y hambre es porque, en gran medida, tampoco se permite que llegue una gran cantidad de alimentos. Las continuas trabas por parte de las potencias extranjeras para evitar su desarrollo son bien conocidas, pero claro, esto no conviene esparcirlo a los cuatro vientos, ¿verdad?. No importa que cientos de personas mueran de hambre a causa del aislamiento forzado que sufre el país, sino que es más crucial decir que se mueren de hambre por culpa del egoísmo del propio gobierno coreano. 

En este punto no quiero que se crea que defiendo las nefastas "políticas" de Kim Jong-Un, el cual no dudo que tendrá las manos manchadas de sangre, pero he ahí la cuestión: ¿es Kim Jong-Un el único tirano?, ¿o es que ciertos presidentes de los países occidentales son tan santos que jamás han apoyado e incluso dirigido ninguna guerra?. Que se sepa, el único país que ha utilizado la bomba atómica es Estados Unidos, y lo hizo sobre cientos de miles de civiles inocentes, que es peor. Luego tenemos que soportar que Obama denuncie lo de los campos de concentración de Norcorea cuando él mismo tiene a Guantánamo en pleno funcionamiento. Repito, un campo de concentración en un país "democrático", ¿Es eso ético?. 

A estas alturas uno ya puede ver la doble moral de los países "desarrollados". Países que abanderan la libertad como estandarte cuando mucha de la materia prima de la que se nutren viene de países tercermundistas (algunos de ellos con sus debidos dictadores y todo). Materia prima barata conseguida mediante una explotación todavía más barata, ¿verdad que es un negocio redondo?. Aún así, parece que seguimos empeñados en creer que Europa y Estados Unidos son la blanca paloma que solo prodiga la paz, la libertad y la democracia y que no es el monstruo expansionista en el que realmente se han convertido. Insisto, no estoy defendiendo el régimen autoritario de Corea del Norte, pero es que los que tanto lo critican no son mucho mejores que digamos. Siempre he dicho que para criticar se debe predicar antes con el ejemplo, y en este caso occidente no es un ejemplo de nada y no considero que tenga la "autoridad moral" para denunciar matanzas, injusticias, etcétera. Lo único que tenemos que hacer para comprobarlo es revisar la historia.

La censura en la prensa

Mucho se ha dicho sobre la enorme manipulación y la censura que ejerce Norcorea sobre su pueblo, y debo decir que en esto no se equivocan. Los diarios del régimen cuentan asiduamente barbaridades como que son capaces de construir vivientas en 4 minutos y 54 segundos y que, ojo al dato, en un día pueden llegar a edificar viviendas para 200 familias. Para alguien acostumbrado a poner en duda todo lo que lee parece hasta un chiste de mal gusto, pero lamentablemente los ciudadanos norcoreanos no acostumbran a cuestionarse nada, por lo que se lo tragan todo a pies juntillas. 

¡Pero espera!, casi se me olvida decir que en los países "democráticos" también existe esa censura que tanto denuncian. Lo que está ocurriendo en Ucrania, las "revueltas" en Siria, Venezuela (más recientemente), Egipto, Libia y la guerra de Irak son ejemplos claros de hasta que punto se puede llegar a manipular la información para poner a la opinión pública en la dirección de los intereses capitalistas. No existen verdades absolutas en las noticias, sino medias verdades mezcladas con mentiras. Solo cuando se comprenda esto lograremos avanzar y verlo todo desde una perspectiva ajena a ambos bandos.